La pretensión de esta obra era la de analizar las formas de pensar y escribir sobre sexualidad de las sociedade smodernas, y el resultado es realmente apasionante. Su recorrido sobre el pensamiento de los sexólogos del XIX y del XXX, sobre Freud, sobre los movimientos feministas, sobre los movimientos sexuales radicales... está lleno de rigor y audacia, y también de compromiso con unas ideas que, como él mismo formula en el prólogo a esta edición, fundamentan los valores éticos e intelectuales de este libro: la sexualidad no es un destino; "puede qu eno podamos escoger la manera en la que sentimos, lo que deseamos, pero podemos elegir lo que hacemos con esos sentimientos y deseos".