¿Se ha conseguido la igualdad real de derechos entre mujeres y hombres, una vez reconocida la igualdad legal? ¿Vivimos instalados en el espejismo de la igualdad? A estas y otras preguntas va dando respuestas este claro e interesante ensayo en el que la autora analiza la realidad sociocultural en la que confluyen desigualdades, libertad y opresión, construcción de la personalidad de género y discurso antifeminista, con sus poco entendidos temas de igualdad, libertad, diferencia.

Una documentada reflexión sobre la experiencia vital de las mujeres en las ciudades, el tradicional espacio público masculino, frente al hogar o espacio privado femenino, controlado por el porder patriarcal. Presentes de mil modos en la vida urbana, las mujeres encuentran en ella un espacio de independencia y autonomía, pero, también un túnel de pobreza y miedo. La ciudad planificada históricamente por varones, puede ser un espacio para el cambio, si en su organización se deja participar a las mujeres.