Este libro es una muestra de la producción literaria de las mujeres a lo largo del tiempo y una restitución de su presencia en la historia de la literatura evitando caer en el biés androcéntrico que ignora y menosprecia a las mujeres y su creación.
En la primera parte, hay doce fichas que ofrecen una presentación de la vida y obra de una autora, seguida de una selección de textos con propuestas de trabajo diversificadas. La segunda parte es una bibliografía comentada importante para profundizar en la ginecocrítica.

Trata de las interrelaciones entre la lengua y la discriminación sexista, del fuerte sexismo que impregna el uso de la lengua. Empieza con un apartado que pretende mostrar el estado de la cuestión del eterno, y siempre presente, sesgo sexista y androcéntrico tanto en la lengua que utilizamos como en materiales muy diversos.