En La cara desnuda de la mujer árabe, Nawāl al-Saʻdāwī con su pluma afilada como el escalpelo, osa rasgar el velo de silencio que envuelve a la mujer de los países árabes.

Nacida en la pobreza en el norte de la India, Phoolan Devi se ha convertido en la bandida más célebre de la historia de su país y una leyenda viviente reverenciada por millones de personas. Su infancia que transcurrió en el valle de Chambal estuvo tan profundamente marcada por las injusticias del sistema de castas que Phoolan se rebeló y comenzó a luchar acción sin precedentes en el mundo de las mujeres indias.

En 1960 las mujeres magrebíes parecían dispuestas a conquistar una libertad que siempre se les había negado. En 1990, muchas de ellas parecen aceptar un retorno a la versión más conservadora del islam, el islamismo. ¿Qué ha sucedido durante estos últimos treinta años? ¿Por qué la condición de una mujer sigue siendo, aún en este fin de siglo, el mayor elemento de divergencia entre conservadores y modernistas y una de las apuestas primordiales en cualquier proyecto de sociedad que se afronta en el Magreb, desde que sus respectivos países lograron la independencia?