Cristina Guzmán, profesora de idiomas
La necesidad de Carmen de Icaza de comunicar sus sentimientos, sus vivencias, sus impresiones comienza apenas sabía escribir. Aunque todos los personajes de sus obras están descritos con innegable destreza, son las protagonistas femeninas sobre las que recae el peso del relato, y las que marcan el espíritu de cada novela. Pues si bien las aventuras que corren son meros productos de la imaginación de su autora, ésta ha sabido, consciente o inconscientemente insuflar en ellas su propia personalidad.